Violeta es una de las heroínas más icónicas de
la ópera. Sin embargo, el estreno de La Traviata
escandalizó por su crítica a la burguesía y sus
vicios, resultando en un fracaso inicial. Esta obra, basada en un texto
contemporáneo, anticipa los dramas de la escuela realista.
La partitura muestra a Verdi en su máxima
expresión: con una música dramáticamente efectiva e innovadora en armonía,
melodía y ritmo. El preludio es ejemplar, aludiendo tanto a la vida frívola de
Violeta como a los temas centrales de amor y muerte. Verdi rompe esquemas
musicales al iniciar con la imagen de la muerte de la protagonista, pasando
luego por sus sufrimientos, su amor por Alfredo y, finalmente, la despreocupada
fiesta parisina.